SEGUNDO TRABAJO INTEGRADOR
‘’´´Ideas´´- designa todo aquello que en nuestra vida
aparece como resultado de nuestra ocupación intelectual. Pero las ‘’creencias’’
se nos presentan con el carácter opuesto. No llegamos a ellas tras una faena de
entendimiento, sino que operan ya en nuestro fondo cuando nos ponemos a pensar
sobre algo.´´
JOSÉ ORTEGA Y GASSET
Muchas veces confundimos los términos ideas y creencias y
pensamos que nuestras creencias son las ideas acerca de la vida con las que nos
regimos, pero esto es erróneo ya que las creencias no son algo que se nos
ocurren por una u otra cosa a diferencia de las ideas, las creencias son algo
ya establecido a lo largo de la historia y el algo que se nos implanta o que
nacemos perteneciendo en estas, la cultura, la sociedad y miles de factores que
nos rodean cuando nos desarrollamos harán que comencemos a percibir la realidad
de cierta manera y va a estar basada en su mayoría por las creencias que
tenemos. Por eso no podemos formularlas, sino que coexistimos y aludimos a
ellas como toda la realidad que nos rodea, en cambio una teoría solo existe
mientras es pensada.
Las ideas son algo que formulamos para resolver una realidad
problemática, pero ocupan un segundo plano si las comparamos con las creencias
que en ellas no nos tenemos que poner a pensar o a cuestionarlas, sino que se
viven siempre, se da por hecho que ahí están.
Cuando ya ‘’cuentas con algo’’ es una creencia, por ejemplo
en la mañana sales a la calle y no te cuestionas si va a ver luz o no,
simplemente lo das por sentado, puede que se te ocurra llevar paraguas por si
llueve, o una gorra por si hace mucho sol, pero en ningún momento dudas si
tienes que llevar una linterna contigo en la mañana, porque cuentas con que va
a ver luz en la mañana por más nublado que este y estas seguro de que la falta
de luz por la mañana no te impedirá ver. A estas cosas que ya damos por hecho o
que ya contamos con ellas sin si quiera pensarlas son las creencias y si se
quisiera estudiar las creencias del hombre de alguna época en específico se
tendría que comenzar por enlistar todas las cosas que ya damos por sentado y
que no nos detenemos ni un minuto a pensar si están o no, porque son
conocimientos que vamos entendiendo que intrínsecamente a cualquier situación
van a estar ahí.
Las idas son ocurrencias o pensamientos que no existen en la
realidad, sin importar si son recibidos u originales estos no tienen un valor
de realidad ya que solo existen dentro de nosotros, en cambio en las creencias
se vive dentro de ellas, por eso no le damos una importancia intelectual,
porque nos parecen tan lógicas y contamos tanto con ellas que nos cuesta
trabajo darnos cuenta de ellas.´´ Entre nosotros y nuestras ideas hay, siempre
una distancia infranqueable: la que va de lo real a lo imaginario. En cambio,
con nuestras creencias estamos inseparablemente unidos. Por eso cabe decir que
las somos. Frente a nuestras concepciones gozarnos un margen mayor o menor de
independencia. Por grande que sea su influencia sobre nuestra vida, podemos
siempre suspenderlas, desconectarnos de nuestras teorías.´´ JOSÉ ORTEGA Y
GASSET
En esta época se le ha dado mucha importancia a la
intelectualidad, vivimos creyendo en nuestros pensamientos y muchas veces
creemos que vivimos en una realidad que nosotros mismos creamos en nuestros
pensamientos y no está mal del todo la intelectualidad, el problema es que nos
hemos enfocado tanto en las ideas del hombre e intentar analizar por medio de
la razón cada cosa, que nos hemos alejado un poco de la realidad que nos rodea
y le damos más importancia a las ideas y teorías que comenzamos a crear a cerca
de todo. Pero que mejor cuando podemos comprobar la realidad en base a la razón
y así poder entender el porqué de la realidad que nos rodea.
Al hacer coincidir nuestras ideas con la realidad y comprobarlas
científicamente podemos decir que se está generando conocimiento y el
conocimiento según LUIS VILLORO es ´´ un proceso psíquico que acontece la mente
de un hombre; es también un producto colectivo, social, que comparten muchos
individuos. Para adquirir un conocimiento se necesita saber y para saber se
necesita creer, a diferencia que para creer no se necesita saber. El saber
tiene razones comprobables y congruentes con lo que pasa en la realidad. Se pueden
tener dos tipos de creencias, erróneas y acertadas, al decir ´´creo´´, estas
afirmando que no estas totalmente seguro de lo que sugieres, es lo que tu
supones como real o correcto, pero no cuentas con las suficientes bases para
respaldar tu sugerencia o afirmación. Ahora que saber no siempre significa
creer, como cuando te dicen que alguien se murió y lo sabes y es un hecho, pero
cuesta creerlo por lo difícil que sugiere aceptar la realidad. Aunque el sentido
esencial de la palabra saber, implica necesariamente creer, pues no se puede
saber sin dar por hecho que ese algo es verdadero.
Cuando afirmas que sabes, no pones en cuestión si lo crees o
no, por ejemplo sabemos que el agua moja y que el fuego quema y no lo ponemos
en cuestión simplemente lo sabemos y por ende lo creemos, si al hacer estas
afirmaciones no las creyera, sería algo totalmente contradictorio. Sin embargo
todos creemos muchas cosas sin tener la certeza de que lo sabemos. Lo que
condiciona a una creencia para que sea verdad es que coincida con la realidad,
es como en la antigüedad se creía que todo el sistema solar giraba alrededor de
la tierra, sin embargo esto era falso, por lo tanto era solo una creencia,
cuando se descubrió que el sistema solar gira, alrededor del sol, esto se convirtió
en saber porque es un conocimiento que coincide con la realidad. ‘’Sólo a
creencias que consideramos como verdades las llamamos ´´saberes´´´´ LUIS
VILLORO, por lo tanto saber es tener una creencia verdadera.
Si creo algo y es cierto es un saber, pero si acertaste por
casualidad con la verdad a la hora de sugerir algo que no estas cien por ciento
seguro de su validez no se puede afirmar que sabe, sí, definitivamente está en
lo correcto, pero no está llegando a esta información porque está seguro de
ella y tiene las bases suficientes para demostrar por qué y cómo llego hasta
ese conocimiento. Por ejemplo, existen dos guías hacia el mismo destino, uno
sabe cómo llegar y conoce el camino a la perfección y está seguro de que va a
llegar a su destino porque tiene la información o las bases suficientes para
llegar a la meta final sin equivocaciones, y el segundo guía desconoce el
camino en su totalidad, sin embargo por coincidencia o por azar llega al mismo
destino sin errar en el camino, sí, los dos llegaron al mismo destino, pero el
segundo guía no se podría afirmar que sabía porque la razón real de su acierto
es el azar. Así, acertar por casualidad, no es suficiente para considerarlo
como saber, una condición para esto es que la creencia tenga las suficientes
justificaciones para poder demostrar su realidad. Entonces para que algo se
considere como saber tiene que cumplir con tres condiciones: 1. Se tiene que
creer en lo que se está diciendo 2. Lo que se está diciendo coincide con la
realidad, es verdadero 3. Se tienes las razones suficientes para demostrar que
el saber es verdadero.
‘’Queremos conocer, ante todo, por motivos prácticos; nos
interesa saber porque, de lo contrario, no podríamos actuar, ni por ende vivir.’’
EL MENON. De alguien que siempre acierta por fortuna, no se podría decir que
conoce, porque puede llegar a pasar que siempre se acierte y se crea que se
conoce, aun sin tener las bases suficientes, pero esto, en realidad es acertar
en la práctica tus conjeturas. En el caso del saber, nuestras creencias están ligadas
a nosotros, vivimos en ellas y estamos arraigadas a ellas. Por lo que el
conocimiento, sin duda, es mucho más valioso que la creencia acertada, porque
el conocimiento se convierte en una atadura. ‘’Las razones, son los eslabones
con que la inteligencia alcanza la verdad y la amarra para asegurar el éxito en
la práctica.’’ EL MENÓN
‘’Todos los hombres desean por naturaleza conocer’’ Aristóteles.
El conocimiento es un cúmulo de experiencias, sentimientos,
creencias, aprendizajes, gustos, en sí el contexto total de las cosas, pero el
conocimiento no es algo individual, sino algo colectivo. Pera poder adquirir
conocimiento tienes que interactuar, contemplar, analizar y aprender. Desde que
somos pequeños tenemos un deseo constante de aprender, como en nuestros
primeros años de vida donde la pregunta ¿por qué? Se convierte en unas de
nuestras favoritas y esto se debe a que observamos una infinidad de actividades
y situaciones, pero entre menos hemos visto y menos hemos experimentado, menos
conocemos, por lo que nuestra ambición de conocer se vuelve más entre más
conocemos y lo mejor de todo es que el conocimiento es evolutivo, al igual que
la especie, por ejemplo: mientras hace 400 años se creía que la tierra era
plana y ahora se tiene el conocimiento de que vivimos en un cosmos donde no se
conoce su fin. Pues esto mismo pasa con la concepción de la realidad y para
esto se necesita un sentido común, porque existen tantas maneras de percibir la
realidad como espectadores de ella y todas son ciertas, por lo tanto es
necesario establecer una comunicación coherente y establecer normas que nos
permitan vivir en esta sociedad.
Otro punto importante a cerca de nuestra concepción de la
realidad es como percibimos los objetos que nos rodean, como en la edad media,
donde habían relativamente muy pocos objetos, cada uno de estos se le percibía
o se le daba una connotación casi divina ya que al ser tan únicos caía cierto
encantamiento sobre ellos que los hacía casi sagrados, como los cofres, donde
antes se guardaban las cosas de mayor importancia y se atesoraban todas por
igual, en un solo compartimiento sin un orden en específico, pero con forme fue
avanzando la manufactura y la producción a gran escala, el cofre fue
evolucionando para ayudar a llenar los espacios de vacío que se generaba entre
el objeto y el observador, y así se fue concebida la cómoda o cajonera, la cual
se transformó en un objeto de uso cotidiano y común, adquiriendo más
compartimientos y tamaños de compartimientos, lo cual facilito el acomodo de
nuestros objetos íntimos.
Después de buscar desesperadamente llenar los espacios de
vacío con una infinidad de objetos que seguimos inventando, pero llego un punto
donde eran tantos objetos y una variedad de especies dentro de un mismo género
de objetos, que fue necesario comenzar a crear información donde se clasifique
a cada uno de estos objetos, depositando toda esta información en bancos
informativos que ahora han evolucionado en computadoras, y en estas podemos
almacenar una cantidad infinita de datos que nos ayudan a tener un cierto
control y entendimiento de los objetos de estudio que existen y por ende de la
realidad.
En la práctica saber, que creer y saber no es lo mismo te
puede ayudar mucho a distinguir si estas rigiendo tus actos por una creencia y
ni siquiera te estas poniendo a pensar en esta, porque la das por hecho o lo
das por sentado, y solo actúas porque crees que intrínsecamente a lo que pase
estas seguro de que eso no es una variable, sino que estas en ella y vives en
ella, o si de verdad actúas sabiendo con certeza lo que estás haciendo y
pudiendo justificar con razones verdaderas, porque dices lo que dices o actúas
de cierta manera. Por lo que es recomendable actuar en base al conocimiento,
sabiendo que lo que crees es verdadero porque lo puedes justificar y de esta
manera evitar errar en las decisiones que tomamos, porque si solo actuamos en
base a lo que creemos, pero sin tener la certeza de que esta creencia está
arraigada a la realidad, no estamos teniendo el conocimiento, solo es una mera suposición
de la realidad, sin importar si esta es verdadera o no.