domingo, 3 de abril de 2016

SEGUNDO TRABAJO INTEGRADOR
‘’´´Ideas´´- designa todo aquello que en nuestra vida aparece como resultado de nuestra ocupación intelectual. Pero las ‘’creencias’’ se nos presentan con el carácter opuesto. No llegamos a ellas tras una faena de entendimiento, sino que operan ya en nuestro fondo cuando nos ponemos a pensar sobre algo.´´
JOSÉ ORTEGA Y GASSET
Muchas veces confundimos los términos ideas y creencias y pensamos que nuestras creencias son las ideas acerca de la vida con las que nos regimos, pero esto es erróneo ya que las creencias no son algo que se nos ocurren por una u otra cosa a diferencia de las ideas, las creencias son algo ya establecido a lo largo de la historia y el algo que se nos implanta o que nacemos perteneciendo en estas, la cultura, la sociedad y miles de factores que nos rodean cuando nos desarrollamos harán que comencemos a percibir la realidad de cierta manera y va a estar basada en su mayoría por las creencias que tenemos. Por eso no podemos formularlas, sino que coexistimos y aludimos a ellas como toda la realidad que nos rodea, en cambio una teoría solo existe mientras es pensada.
Las ideas son algo que formulamos para resolver una realidad problemática, pero ocupan un segundo plano si las comparamos con las creencias que en ellas no nos tenemos que poner a pensar o a cuestionarlas, sino que se viven siempre, se da por hecho que ahí están.
Cuando ya ‘’cuentas con algo’’ es una creencia, por ejemplo en la mañana sales a la calle y no te cuestionas si va a ver luz o no, simplemente lo das por sentado, puede que se te ocurra llevar paraguas por si llueve, o una gorra por si hace mucho sol, pero en ningún momento dudas si tienes que llevar una linterna contigo en la mañana, porque cuentas con que va a ver luz en la mañana por más nublado que este y estas seguro de que la falta de luz por la mañana no te impedirá ver. A estas cosas que ya damos por hecho o que ya contamos con ellas sin si quiera pensarlas son las creencias y si se quisiera estudiar las creencias del hombre de alguna época en específico se tendría que comenzar por enlistar todas las cosas que ya damos por sentado y que no nos detenemos ni un minuto a pensar si están o no, porque son conocimientos que vamos entendiendo que intrínsecamente a cualquier situación van a estar ahí.
Las idas son ocurrencias o pensamientos que no existen en la realidad, sin importar si son recibidos u originales estos no tienen un valor de realidad ya que solo existen dentro de nosotros, en cambio en las creencias se vive dentro de ellas, por eso no le damos una importancia intelectual, porque nos parecen tan lógicas y contamos tanto con ellas que nos cuesta trabajo darnos cuenta de ellas.´´ Entre nosotros y nuestras ideas hay, siempre una distancia infranqueable: la que va de lo real a lo imaginario. En cambio, con nuestras creencias estamos inseparablemente unidos. Por eso cabe decir que las somos. Frente a nuestras concepciones gozarnos un margen mayor o menor de independencia. Por grande que sea su influencia sobre nuestra vida, podemos siempre suspenderlas, desconectarnos de nuestras teorías.´´ JOSÉ ORTEGA Y GASSET
En esta época se le ha dado mucha importancia a la intelectualidad, vivimos creyendo en nuestros pensamientos y muchas veces creemos que vivimos en una realidad que nosotros mismos creamos en nuestros pensamientos y no está mal del todo la intelectualidad, el problema es que nos hemos enfocado tanto en las ideas del hombre e intentar analizar por medio de la razón cada cosa, que nos hemos alejado un poco de la realidad que nos rodea y le damos más importancia a las ideas y teorías que comenzamos a crear a cerca de todo. Pero que mejor cuando podemos comprobar la realidad en base a la razón y así poder entender el porqué de la realidad que nos rodea.
Al hacer coincidir nuestras ideas con la realidad y comprobarlas científicamente podemos decir que se está generando conocimiento y el conocimiento según LUIS VILLORO es ´´ un proceso psíquico que acontece la mente de un hombre; es también un producto colectivo, social, que comparten muchos individuos. Para adquirir un conocimiento se necesita saber y para saber se necesita creer, a diferencia que para creer no se necesita saber. El saber tiene razones comprobables y congruentes con lo que pasa en la realidad. Se pueden tener dos tipos de creencias, erróneas y acertadas, al decir ´´creo´´, estas afirmando que no estas totalmente seguro de lo que sugieres, es lo que tu supones como real o correcto, pero no cuentas con las suficientes bases para respaldar tu sugerencia o afirmación. Ahora que saber no siempre significa creer, como cuando te dicen que alguien se murió y lo sabes y es un hecho, pero cuesta creerlo por lo difícil que sugiere aceptar la realidad. Aunque el sentido esencial de la palabra saber, implica necesariamente creer, pues no se puede saber sin dar por hecho que ese algo es verdadero.
Cuando afirmas que sabes, no pones en cuestión si lo crees o no, por ejemplo sabemos que el agua moja y que el fuego quema y no lo ponemos en cuestión simplemente lo sabemos y por ende lo creemos, si al hacer estas afirmaciones no las creyera, sería algo totalmente contradictorio. Sin embargo todos creemos muchas cosas sin tener la certeza de que lo sabemos. Lo que condiciona a una creencia para que sea verdad es que coincida con la realidad, es como en la antigüedad se creía que todo el sistema solar giraba alrededor de la tierra, sin embargo esto era falso, por lo tanto era solo una creencia, cuando se descubrió que el sistema solar gira, alrededor del sol, esto se convirtió en saber porque es un conocimiento que coincide con la realidad. ‘’Sólo a creencias que consideramos como verdades las llamamos ´´saberes´´´´ LUIS VILLORO, por lo tanto saber es tener una creencia verdadera.
Si creo algo y es cierto es un saber, pero si acertaste por casualidad con la verdad a la hora de sugerir algo que no estas cien por ciento seguro de su validez no se puede afirmar que sabe, sí, definitivamente está en lo correcto, pero no está llegando a esta información porque está seguro de ella y tiene las bases suficientes para demostrar por qué y cómo llego hasta ese conocimiento. Por ejemplo, existen dos guías hacia el mismo destino, uno sabe cómo llegar y conoce el camino a la perfección y está seguro de que va a llegar a su destino porque tiene la información o las bases suficientes para llegar a la meta final sin equivocaciones, y el segundo guía desconoce el camino en su totalidad, sin embargo por coincidencia o por azar llega al mismo destino sin errar en el camino, sí, los dos llegaron al mismo destino, pero el segundo guía no se podría afirmar que sabía porque la razón real de su acierto es el azar. Así, acertar por casualidad, no es suficiente para considerarlo como saber, una condición para esto es que la creencia tenga las suficientes justificaciones para poder demostrar su realidad. Entonces para que algo se considere como saber tiene que cumplir con tres condiciones: 1. Se tiene que creer en lo que se está diciendo 2. Lo que se está diciendo coincide con la realidad, es verdadero 3. Se tienes las razones suficientes para demostrar que el saber es verdadero.
‘’Queremos conocer, ante todo, por motivos prácticos; nos interesa saber porque, de lo contrario, no podríamos actuar, ni por ende vivir.’’ EL MENON. De alguien que siempre acierta por fortuna, no se podría decir que conoce, porque puede llegar a pasar que siempre se acierte y se crea que se conoce, aun sin tener las bases suficientes, pero esto, en realidad es acertar en la práctica tus conjeturas. En el caso del saber, nuestras creencias están ligadas a nosotros, vivimos en ellas y estamos arraigadas a ellas. Por lo que el conocimiento, sin duda, es mucho más valioso que la creencia acertada, porque el conocimiento se convierte en una atadura. ‘’Las razones, son los eslabones con que la inteligencia alcanza la verdad y la amarra para asegurar el éxito en la práctica.’’ EL MENÓN
‘’Todos los hombres desean por naturaleza conocer’’ Aristóteles.
El conocimiento es un cúmulo de experiencias, sentimientos, creencias, aprendizajes, gustos, en sí el contexto total de las cosas, pero el conocimiento no es algo individual, sino algo colectivo. Pera poder adquirir conocimiento tienes que interactuar, contemplar, analizar y aprender. Desde que somos pequeños tenemos un deseo constante de aprender, como en nuestros primeros años de vida donde la pregunta ¿por qué? Se convierte en unas de nuestras favoritas y esto se debe a que observamos una infinidad de actividades y situaciones, pero entre menos hemos visto y menos hemos experimentado, menos conocemos, por lo que nuestra ambición de conocer se vuelve más entre más conocemos y lo mejor de todo es que el conocimiento es evolutivo, al igual que la especie, por ejemplo: mientras hace 400 años se creía que la tierra era plana y ahora se tiene el conocimiento de que vivimos en un cosmos donde no se conoce su fin. Pues esto mismo pasa con la concepción de la realidad y para esto se necesita un sentido común, porque existen tantas maneras de percibir la realidad como espectadores de ella y todas son ciertas, por lo tanto es necesario establecer una comunicación coherente y establecer normas que nos permitan vivir en esta sociedad.
Otro punto importante a cerca de nuestra concepción de la realidad es como percibimos los objetos que nos rodean, como en la edad media, donde habían relativamente muy pocos objetos, cada uno de estos se le percibía o se le daba una connotación casi divina ya que al ser tan únicos caía cierto encantamiento sobre ellos que los hacía casi sagrados, como los cofres, donde antes se guardaban las cosas de mayor importancia y se atesoraban todas por igual, en un solo compartimiento sin un orden en específico, pero con forme fue avanzando la manufactura y la producción a gran escala, el cofre fue evolucionando para ayudar a llenar los espacios de vacío que se generaba entre el objeto y el observador, y así se fue concebida la cómoda o cajonera, la cual se transformó en un objeto de uso cotidiano y común, adquiriendo más compartimientos y tamaños de compartimientos, lo cual facilito el acomodo de nuestros objetos íntimos.
Después de buscar desesperadamente llenar los espacios de vacío con una infinidad de objetos que seguimos inventando, pero llego un punto donde eran tantos objetos y una variedad de especies dentro de un mismo género de objetos, que fue necesario comenzar a crear información donde se clasifique a cada uno de estos objetos, depositando toda esta información en bancos informativos que ahora han evolucionado en computadoras, y en estas podemos almacenar una cantidad infinita de datos que nos ayudan a tener un cierto control y entendimiento de los objetos de estudio que existen y por ende de la realidad.

En la práctica saber, que creer y saber no es lo mismo te puede ayudar mucho a distinguir si estas rigiendo tus actos por una creencia y ni siquiera te estas poniendo a pensar en esta, porque la das por hecho o lo das por sentado, y solo actúas porque crees que intrínsecamente a lo que pase estas seguro de que eso no es una variable, sino que estas en ella y vives en ella, o si de verdad actúas sabiendo con certeza lo que estás haciendo y pudiendo justificar con razones verdaderas, porque dices lo que dices o actúas de cierta manera. Por lo que es recomendable actuar en base al conocimiento, sabiendo que lo que crees es verdadero porque lo puedes justificar y de esta manera evitar errar en las decisiones que tomamos, porque si solo actuamos en base a lo que creemos, pero sin tener la certeza de que esta creencia está arraigada a la realidad, no estamos teniendo el conocimiento, solo es una mera suposición de la realidad, sin importar si esta es verdadera o no.

1 comentario:

  1. Buena exposición de las ideas principales Jonathan, pero hace falta traer los diálogos de los blogs de los compañeros.

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